Un entorno virtual de Arch Linux puede ser tu aliado perfecto para experimentar con este potente sistema operativo sin comprometer tu máquina principal. Te guiaré paso a paso en la configuración de una máquina virtual KVM para instalar Arch Linux, permitiéndote sumergirte en su versatilidad de forma segura y controlada.
Antes de lanzarnos a la aventura de instalar Arch Linux en una máquina virtual, asegurémonos de tener todo listo. Necesitarás:
• Un sistema anfitrión con Linux y soporte para virtualización.
• KVM (Kernel-based Virtual Machine) instalado y configurado.
• La imagen ISO de Arch Linux más reciente.
• Al menos 20 GB de espacio libre en disco.
• 4 GB de RAM disponibles para la máquina virtual.
Verifica que tu CPU soporta virtualización ejecutando el siguiente comando en la terminal:
«`
egrep -c ‘(vmx|svm)’ /proc/cpuinfo
«`
Si el resultado es mayor que 0, estás listo para seguir. Ahora sí, ¡manos a la obra!
Creación de la máquina virtual
Vamos a utilizar virt-manager, una interfaz gráfica que simplifica la gestión de máquinas virtuales KVM. Si aún no lo tienes instalado, puedes hacerlo con el gestor de paquetes de tu distribución.
1. Abre virt-manager y haz clic en «Crear nueva máquina virtual».
2. Selecciona «Medio de instalación local (imagen ISO o CDROM)» y elige la ISO de Arch Linux que hayas descargado.
3. Configura la RAM (recomiendo al menos 2 GB) y los núcleos de CPU (2 como mínimo).
4. Crea un disco virtual de al menos 20 GB.
5. En el último paso, asegúrate de marcar «Personalizar la configuración antes de instalar».
Ajusta la configuración de red para que la máquina virtual tenga acceso a internet. El modo NAT suele funcionar bien en la mayoría de los casos.
Una vez creada la máquina virtual, es hora de iniciar el proceso de instalación. Al arrancar, selecciona la opción «Arch Linux install medium» en el menú de GRUB.
Cuando llegues al prompt de comandos, estarás listo para comenzar la instalación. Aquí es donde empieza la verdadera diversión para los amantes del control total sobre su sistema.
Particionado del disco virtual
El particionado es un paso crucial. Vamos a crear un esquema simple pero funcional:
1. Usa `fdisk -l` para identificar tu disco virtual (normalmente /dev/vda).
2. Ejecuta `fdisk /dev/vda` para iniciar el particionado.
3. Crea una partición de arranque (EFI) de 512 MB.
4. Crea una partición swap de 2 GB.
5. Utiliza el espacio restante para la partición raíz.
Formatea las particiones con los sistemas de archivos adecuados:
«`
mkfs.fat -F32 /dev/vda1
mkswap /dev/vda2
mkfs.ext4 /dev/vda3
«`
Instalación del sistema base
Ahora viene la parte emocionante: instalar Arch Linux en tu máquina virtual. Sigue estos pasos:
1. Monta la partición raíz: `mount /dev/vda3 /mnt`
2. Crea y monta el directorio EFI:
«`
mkdir /mnt/boot
mount /dev/vda1 /mnt/boot
«`
3. Instala el sistema base:
«`
pacstrap /mnt base linux linux-firmware
«`
Este proceso puede llevar unos minutos, dependiendo de tu conexión a internet. Aprovecha para prepararte un café, lo vas a necesitar para los siguientes pasos.
Configuración del sistema
Con el sistema base instalado, es hora de darle forma a tu Arch Linux virtual:
1. Genera el archivo fstab: `genfstab -U /mnt >> /mnt/etc/fstab`
2. Haz chroot al nuevo sistema: `arch-chroot /mnt`
3. Establece la zona horaria:
«`
ln -sf /usr/share/zoneinfo/TuZona/TuCiudad /etc/localtime
hwclock –systohc
«`
4. Edita `/etc/locale.gen`, descomenta tu locale y genera los locales:
«`
locale-gen
echo LANG=es_ES.UTF-8 > /etc/locale.conf
«`
5. Configura el nombre de host:
«`
echo tuHostname > /etc/hostname
«`
Instalación del gestor de arranque
Para que tu sistema virtual pueda iniciar correctamente, necesitas un gestor de arranque. GRUB es una opción popular y confiable:
1. Instala los paquetes necesarios:
«`
pacman -S grub efibootmgr
«`
2. Instala GRUB en el sistema:
«`
grub-install –target=x86_64-efi –efi-directory=/boot –bootloader-id=GRUB
«`
3. Genera el archivo de configuración:
«`
grub-mkconfig -o /boot/grub/grub.cfg
«`
Antes de reiniciar tu flamante Arch Linux virtual, hay algunos detalles finales que atender:
1. Establece una contraseña para el usuario root:
«`
passwd
«`
2. Instala y configura un cliente de red:
«`
pacman -S networkmanager
systemctl enable NetworkManager
«`
3. Sal del entorno chroot, desmonta las particiones y reinicia:
«`
exit
umount -R /mnt
reboot
«`
¡Felicidades! Has instalado con éxito Arch Linux en una máquina virtual KVM. Al reiniciar, deberías ver la pantalla de inicio de sesión de tu nuevo sistema.
Recuerda que este es solo el comienzo. Arch Linux brinda un lienzo en blanco para que personalices tu sistema exactamente como deseas. Experimenta, aprende y, sobre todo, disfruta del control total que Arch te ofrece en este entorno virtual seguro.